El mes de enero ha sido muy intenso en temas de política exterior. Y es que para el proceso que encabeza el Presidente Chávez, la acción internacional está directamente relacionada con la gestión de gobierno. Por ello, para intentar dibujar una hoja de ruta de la política internacional del gobierno bolivariano de Venezuela, debemos tener en cuenta siempre la coyuntura interna.
Las reacciones al terremoto en Haití ratifican el eje fundamental de la política antinorteamericana, de forma transversal en el resto de la agenda. En este sentido durante el año 2010 , es posible que veamos al Presidente Chávez y a su aparato de política exterior subir la retorica anti-norteamericana, pero buscando garantías al interior de los Estados Unidos que permitan los suministros de recursos económicos y no inicien acciones unilaterales o multilaterales que pongan en peligro, al menos en este año, la articulación económica internacional del país.
Este objetivo fundamental de la política venezolana, deberá ser balanceado con los objetivos estratégicos de la revolución bolivariana, en la búsqueda de lo que se ha llamado como el “mundo multipolar”, con la promoción de las relaciones con China, Rusia, Suráfrica y la India. El caso de Irán, será elevado desde el punto de vista discursivo, pero teniendo mucho cuidado de no alterar el status quo, tanto al nivel interno en Irán o Venezuela, o con la comunidad internacional. Las sanciones contra Irán por el desarrollo de su programa nuclear se harán más profundas y Venezuela no arriesgará su objetivo de estabilidad financiera por el socio persa, al menos en este año de transición política en el país.
América del Sur evolucionó en el mapa geopolítico chavista. Este año la correlación de fuerzas a favor del Presidente Chávez cambió de manera dramática, cinco países abandonan el grupo: Honduras denuncia el Alba, los nuevos jefes de estado socialistas del continente en El Salvador y Uruguay han expresado dudas sobre el socialismo del siglo XXI como camino de la izquierda y por el otro lado, los empresarios presidentes de Panamá y Chile han movido sus gobiernos en contra de la corriente chavista.
Veremos entonces, una política más efectista, que busque la consolidación del eje del Alba, pero poca exposición en los foros que no puedan controlar y en la búsqueda de nuevos espacios, nuevos países que garanticen una exposición mediática sin peligros.
Publicado en el diario El Nuevo País. Caracas, 24 de Enero de 2010.
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